Las vitaminas y los minerales ofrecen al cuerpo humano los nutrientes necesarios para mantenerlo y subsanar cualquier daño. El hierro es uno de los minerales requeridos por la mujer en el embarazo; así como también el calcio, el fósforo y el zinc.
El Hierro y el Embarazo
Este mineral tan importante llamado hierro tiene diversas tareas en el organismo, entre las que están la producción de energía en los músculos ya que forma parte de ellos; el llevar oxígeno a los tejidos del cuerpo, la síntesis del ADN, entre otras. Por otro lado una parte de el es almacenado en el hígado y la médula ósea.
La cantidad de hierro que necesitamos para nuestro cuerpo aumenta en la edad reproductiva de la mujer, en el embarazo y la lactancia. Por esta razón durante el embarazo es recomendado un suplemento de hierro, ya que mediante la alimentación diaria no se logra satisfacer los requerimientos de este mineral. Usualmente se les recomienda a las mujeres en gestación tomar diariamente algun suplemento que contenga 30 mg de hierro durante los dos primeros trimestres que es cuando el bebé lo acumula para utilizarlo durante sus primeros meses de nacido.
Cabe destacar que en el embarazo el volumen de sangre crece en un 50% por lo que se debe reabastecer la hemoglobina, que es la encargada de distribuir el oxígeno por todo el cuerpo de la madre de su bebé, lo que hace necesario el consumo extra de hierro.
Debemos tener en cuenta que para garantizar la absorción del hierro en el embarazo, este se debe combinar con alimentos que lo contengan y que contengan vitamina C; como son la naranja, la mandarina, el mango, la guayaba, el coliflor, la espinaca, el tomate, el pepino y el repollo; o en su defecto suplementos de vitamina C.
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